Mi experiencia con la lactancia comenzó hace ya 18 meses… Dicho así, ahora, hasta me parece poco tiempo… Empezó casi sin haberlo pensado previamente y, de pronto, se convirtió en un constante pensamiento.

Cuando di a luz, ni me lo había planteado. Simplemente, surgió de forma natural y espontánea con una gran subida de leche que encendió el interruptor más primitivo del ser humano, ese que nos conecta con nuestro lado más animal e instintivo: la supervivencia de los hijos. Y fue en ese momento cuando supe que quería amamantar a mi bebé.

Los inicios no fueron fáciles, aunque después de estos meses, he de confesar que tampoco difíciles. Los primeros meses estaba inundada de dudas y preocupaciones que, en ocasiones, no me dejaron ver con claridad. Por suerte, y con la ayuda adecuada, hoy puedo decir que continuar con la lactancia es un regalo y que me alegro mucho por ello.

En mi caso, todo ha transcurrido con normalidad y no puedo decir que haya vivido ninguna complicación asociada a la lactancia. ¡Claro que hemos tenido, y tenemos, noches de llantos por dar el pecho! Pero también hemos disfrutado de la tranquilidad de que, cuando nuestro bebé se ha puesto enfermo, el pecho ha sido lo único que le ha calmado. Y con eso me quedo. Con esa calma y esa tranquilidad. Me quedo con la cara de placer y alegría que pone mi hijo cuando le ofrezco el pecho cada día.

Animo a todas las madres a apostar por la lactancia materna. A enfrentarse a algo tan natural como desconocido. Animo a todos los padres por apoyarnos y acompañarnos en este camino. Porque somos muchas y muchos los que sabemos que la lactancia materna requiere un esfuerzo, pero que la recompensa es de tal magnitud que, con el tiempo, ese esfuerzo es insignificante.

A fecha de hoy, mi bebé de 18 meses sigue tomando el pecho y son muchos los que me preguntan cuándo lo vamos a dejar… Ahora ya sé qué responder.

Muchas gracias, Lola, porque sin esas palabras de apoyo y tranquilidad esto hubiera sido muchísimo más complicado, y quién sabe si hubiéramos llegado tan lejos.

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